domingo, 12 de julio de 2009

La canción del pirata: Brasileño en Londres

Moverse tanto y estar en contacto con tanta gente distinta es interesante también por ver las percepciones de los demás en función de su contexto cultural y social. Y aun más cuando se refieren a uno mismo.


Estos y más versos de La del pirata cojo (Joaquín Sabina, Física y Química, 1992, uno de sus mejores discos) - cantada en el link a dúo por Serrat y Sabina, mayores, cascados pero serenos - enumeran personajes y sitios. Yo podría escribir la mía así:

Libanés en París
Catalán en Madrid
Iraní en New Yoooooork.

En París me confundieron con un Libanés varias veces por el físico, el acento y el contexto. Recuerdo la primera vez: fue en el Bon Marché, grandes almacenes parisinos pijos e históricos, cuya traducción directa es "el barato", a los que, pardillo de mí, atraído por el nombre, fui a comprarme sábanas para pasar mi primera noche en París tras conseguir las llaves de mi buhardilla en el 43 del Boulevard Garibaldi. Parece ser que los libaneses que viven en París, son los educados en Francés en su país, generalmente gente pudiente, y clientes habituales del Bon Marché.

Presentarse como Manel en Madrid provoca dos reacciones mayoritarias: la primera es extrañeza por esa "u" que le falta al castizo Manuel y que generalmente se atribuye a un error o, mejor, una excentricidad en plan Mané. La otra posibilidad, para los más leídos y capaces de reconocer que se trata de un nombre propio en catalán, pero generalmente inconscientes del alcance que esa lengua en el territorio español, dan por sentado que soy Catalán.

En cambio, en NYC los peluqueros uzbekos que me solían cortar el pelo por $12 más tres de propina, se empeñaban en que soy Iraní. Porque hay muchos, porque siendo estudiante esperaba a tener mis rizos bastante largos antes de cortarme el pelo y me afeitaba de uvas a peras, y no sé por qué más.

Y claro, ciudad nueva, vida nueva. Aquí en Londres parece que voy a ser Brasileño. Es cierto que en Londres hay mucho brasileño (¿os acordáis de éste?), pero caramba, es que ayer sábado ya me lo dijeron tres veces: Una dependienta brasileña en el dry cleaning, un taxista nigeriano, e incluso unas turistas americanas en una pizzeria en King's Cross.

Así que supongo que el siguiente verso de mi canción del pirata es:

[...] Brasileño en Londres.

1 comentario:

irune dijo...

Yo he sido,

Polaca en Londres
Iraní en India y
Brasileña en Boise