martes, 26 de enero de 2010

Up in the air

En un improbable vuelo con destino a Pau, embarcado en un avión imposible, un Canadair de 50 plazas, sentado en la última fila del avión, la 13, bautizada con el número 14 por esa ridículamente curiosa superstición de la que todavía hacen gala un gran número de compañías, acompañado por 38 hombres y tres mujeres (el trayecto menos igualitario que recuerdo), mientras me termino un libro de Benedetti robado a mi hermano (en realidad Jaume se lo dejó olvidado en una de sus visitas a Nueva York), me dedico a contar el número de vuelos que hago esta semana: cinco.

Me sonrío ingenuamente al reconocerme en el personaje de George Clooney en la peli Up in the Air que vi la semana pasada en el cine de mi barrio (qué bien suena, eh? no os engañéis: se trata de los multicines del centro comercial que hay en Angel). Un tío que se pasa muchas horas en el avión (muchas más que yo), que siempre viaja en primera (al contrario que yo) y cuyo ecosistema habitual es el aeropuerto (a mi me gusta tan poco pasar tiempo en ellos, que ya he perdido un par de vuelos). Así pues, aunque hay paralelismos evidentes, esta ingenua comparación no atañe tanto a nuestro respectivos hábitos aeroportuarios como quizás a otros aspectos.

Es un tío con una vida simple, ciertamente nómada, y con pocos compromisos o ataduras. Se encuentra cómodo en ese entorno tan familiar y poco desafiante de los lounges de los aeropuertos. Pero algunas cosas vienen a perturbar su modo de vida. Algunas cosas que él, ingenuamente, no sabe o no quiere leer y que le harán plantearse cambios, abrazar una madurez hasta entonces evitada y que no es necesariamente fácil y agradable. Y el resultado puede doler. Porque todo el mundo se equivoca. Y surge la inevitable pregunta: ¿y luego, qué? ¿y mañana, qué?

Pero ya sabemos que generalmente no es fácil contestar a esta pregunta. No obstante, no debemos dejar de reconocer el mérito que tiene llegar a planteársela.

¿Os he dicho que me gustó la peli?

1 comentario:

Napo dijo...

Manelito, Manelito, quién(es) te están haciendo dudar tanto?

Y otra pregunta menos difícil, qué finde me haces un hueco en tu casita? :)